La endodoncia es la rama de la Odontología que se encarga de la morfología, fisiología y patología de la pulpa dental y de la región periapical del diente. La pulpa es la parte interior del diente y en ella se encuentran los vasos sanguíneos y los nervios.
Causas y síntomas. Caries
La inflamación de la pulpa se denomina pulpitis, que puede ser reversible y no es necesario extirpar la pulpa, o irreversible, siendo necesario eliminar la pulpa o parte de ella. Esta infección suele ser causada por la aparición de caries, traumatismos o la erosión producida por el roce entre los dientes. Los síntomas que produce la pulpitis varían según si la patología es reversible o irreversible.
- Pulpitis reversible:
-Dolor de corta duración provocado por un estímulo, como beber o comer algo frío, masticar…
-El dolor aumenta más con el frío y el calor calma.
-El dolor cede al cesar el estímulo
-El dolor suele localizarse en el diente causante y no se irradia a otros dientes.
-El dolor no aumenta al acostarse.
- Pulpitis irreversible:
-El dolor es continuo
-Puede ser que aparezca espontáneamente o tras un estímulo.
-El dolor persiste tras retirar el estímulo.
-Frecuentemente se irradia a otros dientes.
-El dolor aumenta más con el calor y el frío calma.
-Aumenta al acostarse
Diagnóstico de la pulpa
El diagnóstico en endodoncia es el paso previo para determinar el tipo de patología que presenta un diente y tomar las medidas preventivas o terapéuticas que se requieran. El realizar un diagnóstico correcto requiere habilidad, paciencia y un método sistemático de estudio. La exploración clínica se basa en la inspección, la palpación y la percusión. El conocimiento de la anatomía de la cavidad pulpar de cada diente es imprescindible para realizar un correcto tratamiento endodológico.
Tratamiento de la pulpitis
Normalmente, el paciente cuando nota un dolor dental es porque la caries ha llegado a la pulpa que es donde están los nervios que transmiten el dolor. Mientras que la caries está en los tejidos duros la sintomatología es inexistente o de inflamación pulpar reversible. Cuando la caries llega a la pulpa, ésta se contamina e infecta y hay que extirparla, realizando la endodoncia o tratamiento de conductos.
Este tratamiento tiene distintos pasos. En primer lugar, debemos acceder a la cámara pulpar. Este paso lo realizamos fresando el tejido duro de la corona (esmalte y dentina), lo realizamos con fresas e instrumentos rotatorios y lo llamamos Apertura de Cámara. Tiene como objetivo facilitar el acceso a la cámara pulpar y a los conductos radiculares.
Una vez realizada la apertura de cámara, con limas y tiranervios, vamos limpiando mecánicamente la cámara y los conductos para eliminar los restos de pulpa infectada y limar las paredes de dentina que configuran el sistema de conductos radiculares. Después de cada limado, irrigamos con una solución desinfectante mediante jeringa y aguja los conductos. Esta limpieza química tiene un doble efecto, desinfectar y arrastrar los restos de resina que hemos desprendido con el limado. El limado y el arraigado se van repitiendo alternativamente, hasta que logramos un ensanchamiento adecuado de los conductos y eliminación total del tejido pulpar.
Debemos limar los conductos hasta el foramen apical. Para ello, debemos determinar previamente su longitud. A este paso lo denominamos Conductometría y lo realizamos al introducir la primera lima en el conducto. Realizamos una radiografía con la lima dentro del conducto observando a qué nivel se encuentra. Con correcciones posteriores introduciendo más o menos lima, llegamos a la determinadación de la longitud del conducto en milímetros. Actualmente, existen medios electrónicos de medición del conducto radicular llamados localizador de ápice.
Una vez limados y conformados los conductos radiculares, los obturamos con un material llamado gutapercha y con forma de varillas, que los llamamos conos de gutapercha. Introducimos tantos como podemos dentro del conducto, además los impregnamos de un cemento sellador para conseguir una obturación hermética de los conductos, dando por terminadala endodoncia.
A la técnica de limado y preparación de los conductos se le llama Técnica de Obturación. Existen muchas técnicas de obturación, pero todas ellas tienen como objetivo la compactación de los conos de guatapercha mediante presión, calor o solventes orgánicos.