Cepillarse tiene su procedimiento, llevarlo a cabo tal cual lo indican los odontólogos es lo ideal para evitar daños en la dentadura. Aquí intervienen desde el tipo de cepillo utilizado, la pasta o crema hasta la destreza manual que se tenga.
Si no se tiene una buena higiene bucal, comienzan a surgir las enfermedades periodontales así como también el mal aliento; las encías también deben conservarse en buen estado. Por lo tanto si no se realiza un cepillado correcto, esto puede traer daños muy desagradables.
Otra consecuencia de lo hacerlo bien, es la pérdida del esmalte y la debilidad en los dientes que contribuye a la formación de la caries y la pérdida de éstos, entre otros.
Y aunque suene un poco exagerado, esto también puede causar enfermedades cardiovasculares, respiratorias y reumáticas. Esto ocurre cuando entran bacterias al afluente sanguíneo y causa fuertes infecciones.
El cepillo y la pasta
Los odontólogos recomiendan un cepillo con las cerdas suaves, ya que este tipo es ideal para la eliminación de la placa dental y los restos alimenticias. Deberían ser de cabeza pequeña para que lleguen a toda la zona bucal.
Si es eléctrico es mejor, pues los especialistas aseguran que son los que mejor limpian la dentadura; además de ser de gran ayuda para aquellas personas con limitaciones.
El cepillo debe ser reemplazado por lo menos cada tres meses o, cuando esté desgastado o se haya sufrido algún proceso gripal, ya que algunas bacterias acumuladas pueden inducir una nueva contaminación.
Con respecto a la crema o pasta dental es necesario escoger la adecuada dentro de la gama que el mercado ofrece, ya que existe variedad para los distintos trastornos que se puedan presentar, tales como gingivitis, sarro, caries, sensibilidad, manchas, entre otros.
La mejor manera de cepillarse
Un buen cepillado no lleva más de dos minutos, es más; está confirmado que la mayoría de los adultos no tardan tanto.
Los movimientos deben ser cortos y suaves con especial cuidado en la línea de la encía. Si hay alguna reparación, ésta debe limpiarse bien.
- Primero se deberían limpiar los dientes superiores y luego los inferiores. Aunque se crea que el orden no afecta, es lo recomendado por los especialistas.
- Las superficies internas deben ser primero que las externas y se hace con movimientos verticales de abajo hacia arriba.
- Los movimientos del cepillado deben ser circulares en la parte externa; sin embargo, también se puede usar la llamada técnica de barrido, que es un movimiento suave de izquierda a derecha.
- No se debe aplicar presión al agarrar el cepillo.
- También debe cepillarse la lengua para eliminar bacterias y así tener un aliento fresco.
- La limpieza se debe hacer como mínimo dos veces al día.
Es indispensable, visitar al odontólogo al menos una vez al año.
